GUÍA DEFINITIVA DE:
La felicidad
Carlos Calderón
Aprenderás el concepto de la felicidad, sus aspectos generales, origen y diferentes enfoques que te permitirá responder a la pregunta ¿Cómo ser feliz?
Indice de contenidos
¿Qué es la felicidad?
La felicidad es un sentimiento que nos acerca a estados de bienestar. Es un conjunto de emociones que, mantenidas en el tiempo, producen cambios en el cuerpo y en la mente asociada con vivir plenamente y en buen estado de salud.
La palabra felicidad proviene del latín de la palabra «felicitas», que deriva de la palabra «felix» y significa «fértil» o «fecundo».
Definición de felicidad
La definición de felicidad en el diccionario de Google encontraremos que es un “Estado de ánimo de la persona que se siente plenamente satisfecha por gozar de lo que desea o por disfrutar de algo bueno”
En la definición de felicidad en Wikipedia nos encontramos con: “La felicidad es una emoción que se produce en un ser vivo cuando cree haber alcanzado una meta deseada.”
Y si buscamos la definición de felicidad en el diccionario de la Real Academia Española nos indica que felicidad es un “Estado de grata satisfacción espiritual y física.”
Elementos básicos de la felicidad
Existen algunos elementos básicos y esenciales determinantes que te ayudarán a contestar a la pregunta de cómo ser feliz. Para ello, Dr. Tal Ben-Shahar, especialista de Psicología Positiva de Harvard detalló 5 elementos básicos de la felicidad:
1. Bienestar espiritual
Es la capacidad de tener atención plena (mindfulness) y estar presente en el aquí y ahora.
Existen investigaciones que han demostrado que mediante la meditación el cerebro sufre cambios positivos e incluso el sistema inmune se fortalece.
2. Bienestar físico
Este elemento trata de la conexión mente-cuerpo, y que uno de los factores que más afecta a las personas la relación entre el estrés y el descanso.
3. Bienestar intelectual
Para lograr el bienestar intelectual es necesario lograr un entendimiento profundo de las cosas que hacemos, vemos y leemos.
4. Bienestar relacional
Las relaciones juegan un papel muy importante en la felicidad. Uno de los factores que impacta negativamente en los índices de la felicidad es la falta de relaciones interpersonales de calidad.
Los niveles de felicidad tienen un impacto más duradero cuando se invierte en los demás, que cuando se busca el beneficio propio.
5. Bienestar emocional
El ser humano no puede alcanzar su potencial hasta que no acepte que es humano con defectos y errores.
¿Dónde se origina la felicidad?
Existen numerosos estudios clínicos y experimentales que han mostrado la implicación de los lóbulos frontales con relación al lenguaje y las emociones, sobre todo de una zona concreta: la corteza orbitofrontal.
La corteza orbitofrontal es un área ubicada en la región ventral medial de la corteza prefrontal.
El lóbulo frontal fue la zona cerebral que se desarrolló más tardíamente en la evolución humana. Tiene una capacidad mucho más grande en relación a los demás animales.
En esta zona es donde se ha reconocido científicamente que reside lo que denominamos conciencia, entendida en su vasta extensión, así como los sentimientos, las emociones y todo lo relacionado. Por lo tanto, en esta zona del cerebro, es dónde se establece que también habita la felicidad y todas sus dimensiones.
Neurotransmisores de la felicidad
Los neurotransmisores son sustancias que participan en las sinapsis químicas, cuya interacción con receptores específicos permiten provocar una respuesta determinada.
Existen 3 neurotransitores vinculados con la felicidad:
Las endorfinas: Son considerados como opiáceos naturales del organismo pues ayudan a mitigar el dolor.
La serotomina: Influye en el humor, regula el sueño, el apetito y la presión, además de ser un activo en la sexualidad.
Las dopaminas: Se les atribuye la motivación y el placer. Sus funciones en el cerebro se relacionan con el comportamiento.
Reír, escuchar música, tomar sol, bailar, hacer deportes, reunirse con amigos, cantar entre otras cosas estimulan estos neurotransmisores.
Felicidad según la Ciencia
La ciencia en el ámbito de la psicología, afirma que la felicidad depende de la proporción entre emociones positivas y negativas que experimenta un ser humano.
La psicóloga e investigadora Barbara Fredrickson ha establecido la “ratio” para ser felices en 3 a 1. Es decir, si por cada emoción negativa que sentimos, vivimos tres positivas, sentiremos que somos felices. Esto es así por la asimetría con la que solemos vivir las emociones positivas y negativas. Generalmente las emociones negativas las sentimos de forma más intensa por lo que muchas veces valoramos como neutras muchas emociones que en realidad son positivas.
La ciencia también nos dice que cada uno de nosotros tenemos una determinada predisposición genética hacia la felicidad, es decir, un nivel de felicidad basal que nos es innato y que viene determinado por nuestros genes.
Pirámide de Maslow: De las necesidades básicas a la felicidad
Abraham Maslow, uno de los padres de la filosofía humanista, decía en su libro El hombre autorrealizado que el individuo tiene naturalmente muchas necesidades y que su relación con su existencia depende de su posibilidad de satisfacerlas. Por lo tanto son esenciales para alcanzar la felicidad.
Maslow decía, además, que todas las necesidades eran importantes, pero que la urgencia de satisfacerlas no era la misma en todas. Para explicarlo utilizaba una imagen tan didáctica como poderosa llamada Pirámide de Maslow:
PRIMER NIVEL: Necesidades básicas
En este nivel se agrupan todos los requerimientos primarios de la supervivencia: alimento, agua, techo, descanso, aire respirable…
SEGUNDO NIVEL: Necesidad de seguridad
Relacionado con el deseo de sentir que su entorno físico y social es estable, ordenado y predecible, incluye desde la certeza de ser capaces de seguir satisfaciendo las necesidades primarias en el futuro, hasta situaciones más complejas, como un trabajo estable o un proyecto personal viable.
TERCER NIVEL: Necesidades de Pertenencia
Este nivel refieren al hambre que por fuerza sentimos de ser aceptados por los demás, de estar integrados a un grupo y a la vivencia que se suele llamar “de la doble pertenencia”: Yo pertenezco a este grupo y este grupo me pertenece. Soy parte de esto que de alguna manera me define.
CUARTO NIVEL: Necesidades de valoración
Un grupo de necesidades que incluye tanto el reclamo de ser queridos como el de ser valorados por lo que hacemos, así como respetados por lo que somos. Es la necesidad de aprobación y de prestigio. Y, por extensión, el sentirnos competentes e idóneos en el desempeño de la tarea elegida.
QUINTO NIVEL: Necesidad de autorrealización
Lo que se suele describir como la satisfacción de llegar a ser todo lo que uno es capaz, de sentirse a gusto con la propia existencia; la certeza de poder hacer las cosas siendo congruentes con lo que somos, lo que pensamos y lo que sentimos.
Felicidad según la filosofía
Muchos autores de la filosofía occidental han expresado su visión con relación al concepto de la felicidad pero nos encontramos ante respuestas muy diferentes.
En la filosofía griega clásica existen tres posturas:
- Ser feliz es autorrealizarse, alcanzar las metas propias de un ser humano (eudemonismo), postura defendida por Aristóteles. En cierto sentido, también Platón puede ser encuadrado en esta postura, si bien el horizonte de la felicidad, según Platón, se abre a la vida después de la muerte.
- Ser feliz es ser autosuficiente, valerse por sí mismo sin depender de nada ni de nadie (cinismo y estoicismo).
- Ser feliz es experimentar placer intelectual y físico logrando evitar el sufrimiento mental y físico (hedonismo). Es la postura que defiende Epicuro.
Felicidad según la religión
Las principales creencias religiosas del mundo abordan el tema de la felicidad; con diferentes nombres y presentaciones, pero en esencia lo mismo.
Para el hinduismo, el budismo, el judaísmo, el cristianismo y el islamismo, la felicidad consiste en hacer lo correcto, lo justo, en vivir haciendo el bien a los demás, a cultivar hábitos como el trabajo, la honestidad y la generosidad.
Todas las religiones enseñan a sus fieles a desechar la mentira, el robo, los vicios, porque destruyen la vida y acarrean desgracias.
Se han realizado docenas de estudios científicos sobre religión y felicidad, la gran mayoría han encontrado una relación positiva entre ambas.
“Creer en que existe una vida después de la muerte le da sentido y consuelo a muchas personas, además de paliar el sentimiento de estar solas en el mundo, sobre todo al envejecer”, explica Harold Koenig, del Centro Médico de la Universidad Duke.
“Esto se hace patente en situaciones difíciles. Las creencias religiosas pueden ser un arma muy poderosa para enfrentar la adversidad”.
Alimentos para la felicidad
Según la dietista Neus Elcacho formada en Harvard Medical School, “todo lo que hagas, pienses y comas a lo largo del día te aleja o te acerca a la felicidad”. Nos recomienda mantener una dieta “muy digestiva”, “la digestión es la base de todos nuestros problemas”.También nos dice que a los intestinos se les conoce como el segundo cerebro, ya que tenemos una gran cantidad de neurotransmisores y de hormonas, afirma Elcacho.
Destaca que no solo comiendo una serie de alimentos se consigue la felicidad, sino que además se tiene que seleccionar cuidadosamente que alimentos van a aportar lo que necesitas para trabajar de forma equilibrada.
¿Qué alimentos son recomendables comer para ser feliz?
Toma alimentos ricos en vitamina C, verduras y hortalizas de hojas verdes como espinacas, coles o brócoli; Consume pimientos rojos, tomates y calabaza; también frutas cítricas como las naranjas, pomelos, mandarinas, kiwis, frutos rojos o guayabas. El chocolate negro con un alto porcentaje de cacao es el complemento ideal para tu dieta de la felicidad.
La felicidad en el mundo
Según revela el informe World Happiness Report 2020 (Informe mundial de la felicidad 2020), como cada año, estos son los 10 países más felices del mundo:
1. Finlandia
2. Dinamarca
3. Suiza
4. Islandia
5. Noruega
6. Países Bajos
7. Suecia
8. Nueva Zelanda
9. Luxemburgo
10. Austria
¿Cómo determinan la felicidad de cada país?
Son diversos factores los que se toman en cuenta para generar este informe entre los cuales se encuentran: Producto Interno Bruto per cápita, expectativa de vida saludable, tener alguien con quién contar, libertad para tomar decisiones, percepción de la corrupción, generosidad.
Lo que NO es felicidad
Ya conocimos que es la felicidad, sus definiciones, sus enfoques e incluso hemos aprendido a cómo ser felices, pero, ¿Qué no es la felicidad?
- La felicidad no es hacer lo que uno quiere.
- La felicidad no es la ausencia de miedo.
- La felicidad no está en la improvisación.
- La felicidad no se persigue ni se encuentra.
- La felicidad no es satisfacer los caprichos.
- Sentirse bien no es sinónimo de ser feliz.
- Tener todo el dinero del mundo no es felicidad.
- La felicidad no es huir de todo lo malo que sucede en el mundo.
Ventajas de personas que son felices
Además de hacerte una mejor persona día con día, ser feliz tiene por supuesto sus ventajas y beneficios. Una persona feliz:
- Es más exitosa
- Son más creativos y productivos
- Se enferma menos
- Tiene más amigos
- Se preocupan y ocupan más por los demás (hacen más obras de caridad)
- Ayudan más a los demás
- Tienen una actitud de vida positiva
- Influyen de forma positiva en la gente que aman
- Tienen conversaciones más profundas
- Tienen relaciones más auténticas
- Sonríen más
- Hacen más ejercicio y comen más sano
- Mejoran su sistema inmunológico
- Están contentos con lo que tienen y lo valoran
- Son personas emocionalmente «saludables»
- Viven más tiempo
- Sufren menos estrés